Siempre hemos oído decir que la montaña e smuy traicionera. No es que lo sea, pero lo cierto es que hay una serie de cosas que tenemos que tener en cuenta cuando salimos al monte que muchas veces se transforman en cosas para llevarnos en la mochila, pues de ellas puede depender en muchas ocasiones que salgamos airosos de ciertas situaciones.

Una de las cosas primordiales que has de hacer, es dejar avisado a alguien donde pretendes ir, y al ser posible una copia de un mapa de la zona con los lugares señalados por los que pasarás. Esto no lo metas en la mochila, déjalo en un lugar que sepas que podrán ver en caso de que tardes demasiado en regresar.
  • Ropa para todas las situaciones.

    El tiempo puede cambiar muy rápidamente en la montaña. Es muy importante que lleves ropa adaptada a todas las condiciones climatológicas. Haga el tiempo que haga, llévate siempre un polar, un chubasquero, unos buenos calcetines y por supuesto, un calzado adaptado y cómodo. Lo importante es que sean prendas que conserven el calor y protejan tu cuerpo de la humedad.

  • Gafas de sol.

    La luz solar en altura es mucho más intensa. La presencia de nieve aumenta la radiación, por lo que llevarse unas buenas gafas de sol es fundamental, incluso si el tiempo está nublado.

  • Algo de comer y beber.
    La cantidad dependerá del tiempo de la excursión pero lleva siempre agua, preferentemente en un termo. Para comer, no deben faltar los alimentos muy nutritivos y energéticos como barras de cereales, galletas, frutos secos, etc.
  • Neceser básico.

    En caso de emergencia y para curar cualquier herida, llévate un pequeño botiquín con alcohol, tiritas y vendas. Incluye también un protector solar, repelente de insectos y papel higiénico.

  • Para orientarte.

    Conozcas o no el recorrido, el GPS es uno de los imprescindibles cuando sales de excursión. Por si falla la tecnología, llévate un mapa de la zona o al menos una brújula, pueden salvarte de situaciones muy comprometidas.

  • Navaja multiusos.

    Una navaja del tipo suizo te será de gran utilidad. Cortar, destapar, limar, abrir, destornillar… Nada se te resistirá.

  • Lámpara.

    Linterna de mano o frontal, ¡pero siempre con pilas de más!

  • Para dormir.

    Si prevés irte de excursión varios días, lo importante es llevarte aquello que te permita aislarte de la intemperie: una tienda de campaña, una bolsa de dormir y una esterilla son lo ideal. Y aunque pienses ir y volver en el día, la esterilla y una manta térmica no estarán de más, por si por cualquier imprevisto tienes que quedarte a pasar noche.

  • Cerillas o mechero

    El mechero y las cerillas son imprescindibles, más si te llevas un hornillo. Si llevas fósforos guárdalos siempre en un envase hermético para aislarlos de la humedad.

  • En caso de problemas.

    Antes de salir de excursión, procura tener el contacto de la compañía de rescate de la zona y avisar a tu entorno de la ruta que piensas seguir. ¡Y aunque parezca obvio lleva el móvil a tope de batería!

    Es posible que no siempre necesites parte de lo que mencionamos aquí, pero recuerda que la montaña es impredecible y que los detalles son los que la mayoría de las veces marcan la diferencia.